Cuando un paciente suyo murió de manera misteriosa, la doctora Ripley Davis comenzó a buscar respuestas... Pero entonces apareció Zachary Cage, agente de seguridad en cuestiones de radiación, y le lanzó un sinfín de acusaciones. Ripley no disponía de tiempo para demostrarle su inocencia a aquel atractivo hombre. Lo único que la preocupaba era salvar a sus pacientes y mantenerse con vida.