Un mes de seducción, fantasías… ¿y amor? Amelia Weatherbee había heredado el castillo que su familia tenía en Francia y Remy de Fournier había jurado que iba a recuperarlo costase lo que costase. Pero Amelia puso un precio muy alto: quería que el reputado amante, el privilegiado comte, le enseñase el arte de la seducción… durante un mes. Remy estaba encantado de hacerlo. Lo que no esperaba era que la dulzura y la inocencia de Amelia despertasen algo nuevo dentro de él. ¿Qué pasaría cuando aquellos treinta días de pasión llegaran a su fin?